El Papa Francisco instó el domingo a respetar a los civiles en zonas de conflicto y dijo que la gente estaba cansada de las guerras, que calificó de desastre para los pueblos y una derrota para la humanidad.

Después de su oración semanal del Ángelus en la plaza de San Pedro, el Papa dijo que se debe permitir que la ayuda humanitaria fluya en Myanmar y que la población debe ser respetada también en Medio Oriente, golpeado por la guerra entre Israel y Hamás. También mencionó el sufrimiento del pueblo de Ucrania.

El ejército de Myanmar, que derrocó a un gobierno electo en 2021, ha estado luchando contra una alianza de ejércitos de minorías étnicas que luchan por poner fin a su control sobre sus regiones desde finales de octubre.

Francisco también dijo que se enteró “con alivio” de que un grupo de personas, entre ellas seis monjas, habían sido liberadas en Haití después de casi una semana en cautiverio. La semana pasada había pedido su liberación.