Corea del Norte inaugurará la próxima semana un emblemático sitio turístico costero que, según afirma, marcará el comienzo de una nueva era en su industria turística, aunque se desconoce cuándo el país reabrirá por completo a los visitantes extranjeros.

La zona turística costera de Wonsan-Kalma cuenta con hoteles y otros alojamientos para casi 20.000 huéspedes que pueden nadar en el mar, participar en actividades deportivas y recreativas, y comer en los restaurantes y cafeterías del lugar, según informaron los medios estatales.

El líder norcoreano, Kim Jong-un, recorrió el sitio y cortó la cinta inaugural en una suntuosa ceremonia el martes, según informó la Agencia Central de Noticias de Corea (KCNA).

Kim Jong-un afirmó que su construcción se registrará como uno de los mayores éxitos de este año y calificó el sitio como el primer paso orgulloso hacia la implementación de la política gubernamental de desarrollo turístico.

El balneario de Wonsan-Kalma es el mayor sitio turístico de Corea del Norte. La agencia de noticias KCNA anunció que comenzará a atender a turistas nacionales el próximo martes, pero el informe no especificó cuándo comenzará a recibir turistas extranjeros. Los observadores afirman que el complejo probablemente requirió una gran inversión del limitado presupuesto norcoreano, por lo que eventualmente tendrá que aceptar turistas chinos y de otros países para cubrir gastos.

Kim Jong-un ha estado presionando para convertir al país en un centro turístico como parte de los esfuerzos por reactivar la economía en crisis, y la zona de Wonsan-Kalma es uno de sus proyectos turísticos más comentados. La agencia informó que Corea del Norte también confirmará sus planes de construir grandes sitios turísticos en otras partes del país.

Sin embargo, Corea del Norte no ha levantado por completo la prohibición a los turistas extranjeros que impuso a principios de 2020 para protegerse de la pandemia de COVID-19.

Los expertos afirman que Corea del Norte ha tardado en reanudar su turismo internacional debido a las restricciones pandémicas vigentes, el recrudecimiento de las tensiones con Estados Unidos y Corea del Sur en los últimos años y la preocupación de que los turistas occidentales difundan una imagen negativa de su sistema.

Desde febrero de 2024, Corea del Norte ha estado aceptando turistas rusos en medio del auge de las alianzas militares y de otro tipo entre ambos países, pero los viajes grupales chinos, que representaban más del 90% de los visitantes antes de la pandemia, siguen estancados.

La reciente política exterior de Kim Jong-un prioriza las relaciones con Rusia, ya que ha estado suministrando tropas y armas convencionales para apoyar su guerra contra Ucrania a cambio de asistencia económica y militar. Sin embargo, los lazos de Corea del Norte con China, que durante mucho tiempo ha sido su principal socio comercial y beneficiario de ayuda, aparentemente se han enfriado, ya que China se muestra reacia a unirse a una alianza antioccidental con Corea del Norte y Rusia, según los analistas.

La ceremonia marcó la finalización de la construcción del complejo turístico atrajo al embajador ruso en Corea del Norte y al personal de su embajada, según informó KCNA. Sin embargo, no se especificó si también se invitó a diplomáticos chinos.