El pontífice hizo un llamado a que concluya la guerra en Gaza con la liberación de rehenes y un alto el fuego permanente.
Al final de su audiencia general, el papa León XIV pidió para que las partes y la comunidad internacional se comprometan a poner fin al conflicto en Tierra Santa que ha causado tanto terror y muerte.
El pontífice estadounidense imploró para que todos los rehenes sean liberados, que se alcance un alto el fuego permanente, que se facilite el ingreso seguro de la ayuda humanitaria y que se respete plenamente el derecho humanitario.
León XIV subrayó la obligación de proteger a los civiles y la prohibición del castigo colectivo, el uso indiscriminado de la fuerza y el desplazamiento forzado de poblaciones.
También declaró su apoyo la declaración conjunta realizada por los patriarcas griego y latino de Jerusalén, Teófilo III y Perbattista Pizzaballa, respectivamente, en la que piden poner fin a esta espiral de violencia, el fin de la guerra y la prioridad del bien común de todos los pueblos.









