Altos funcionarios describieron los ataques como una respuesta a los renovados esfuerzos del gobierno para combatir el narcotráfico.
Los fiscales franceses dijeron que abrieron una investigación alegando conspiración terrorista e intento de asesinato después de que varias cárceles fueran blanco de incidentes que incluyeron disparos e incendios provocados.
Altos funcionarios describieron los ataques como una respuesta a los renovados esfuerzos del gobierno para combatir el narcotráfico.
El ministro de Justicia, Gerald Darmanin, escribió en X que se ha intentado intimidar al personal en varias cárceles. Añadió que las medidas contra el narcotráfico desmantelarán masivamente las redes criminales.
La fiscalía antiterrorista francesa anunció en un comunicado la apertura de una investigación sobre una serie de incidentes que alegan conspiración terrorista, intento de asesinato en relación con una acción terrorista y daños y destrucción cometidos por un grupo organizado. Dijeron que la agencia de inteligencia nacional, DGSI, estaría involucrada.
Destacó el contexto sin precedentes de las acciones, los objetivos elegidos y la naturaleza concertada de los delitos cometidos en al menos nueve lugares de Francia. También señalaron el objetivo de perturbar gravemente el orden público mediante la intimidación, como afirma en las redes sociales un grupo llamado Défense des prisionniers français (Defensa de los Prisioneros Franceses).
El ministro del Interior, Bruno Retailleau, dijo en X que ha dado instrucciones a las autoridades y a la policía para que intensifiquen las medidas de seguridad para proteger al personal y las instalaciones penitenciarias.
El sindicato de personal penitenciario UFAP-UNSA Justice dijo que algunos vehículos del personal fueron incendiados frente a las prisiones de Villepinte y Nanterre en la región de París, así como en las ciudades del sur de Aix-en-Provence y Valence. Dijo que también se informó de un intento de incendio provocado en una instalación relacionada con una prisión en Marsella.
Wilfried Fonck, secretario nacional del sindicato, dijo en la televisión BFM que vemos que es algo que está coordinado, organizado y que busca aterrorizar al personal de prisiones.
En los últimos meses, las autoridades francesas han intensificado sus esfuerzos contra el tráfico de drogas centrándose en la cocaína, como ha descrito el Ministro del Interior un “tsunami” inundando el país.
La demanda de cocaína ha alcanzado un máximo histórico: 1,1 millones de personas en Francia la consumirán al menos una vez en 2023, dijo Retailleau.
En total, en 2024 se incautaron 47 toneladas de cocaína, más del doble que el total del año anterior.