El jefe de gobierno alemán, Friedrich Merz, y el presidente francés, Emmanuel Macron, se comprometieron a ayudar a Europa en la carrera por la inteligencia artificial (AI) y liberar al continente de su dependencia de los gigantes tecnológicos estadounidenses.

En una cumbre en Berlín, los dirigentes de las dos mayores economías de la Unión Europea (UE) también respaldaron flexibilizar las normas digitales del bloque, que muchas empresas consideran un obstáculo para su desarrollo.

La cita de la capital alemana reunió, además de los dirigentes, a empresas tecnológicas e inversionistas regionales. Tanto Francia como Alemania afirmaron que están impulsando un “marco regulatorio de la UE sencillo, favorable a la innovación y competitivo” según un comunicado emitido tras la cumbre.

En concreto, solicitan un aplazamiento de 12 meses de algunas partes de la ley de IA de la UE y la simplificación de las normas emblemáticas del bloque en materia de protección de datos, según el comunicado.

El jefe de gobierno alemán instó a Europa a unir fuerzas y forjar su propio camino digital, y este camino debe conducir a la soberanía digital. “La soberanía digital tiene un costo, pero el costo de la dependencia digital es aún mayor”, insistió.

El presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó a su vez que Europa no quiere ser un vasallo dependiente de las compañías tecnológicas de Estados Unidos y de China e instó a diseñar nuestras propias soluciones.

“Creo firmemente que la preferencia por lo europeo debe convertirse en nuestro principio rector, empezando por la contratación pública”, declaró. Macron argumentó que China implementa una preferencia por lo local siempre que puede y Estados Unidos tiene la misma política.

“Nosotros somos los únicos que nunca tenemos preferencia por lo europeo, e incluso a veces nos fascinan las soluciones no europeas”, afirmó el presidente francés.