Esta decisión refleja el mal desempeño de Blancanieves y plantea interrogantes sobre el futuro de otras adaptaciones planificadas.
La película protagonizada por Rachel Zegler en el papel de Blancanieves y Gal Gadot como la Reina Malvada enfrentó diversas controversias desde su anuncio. Estas incluyeron debates sobre el elenco y decisiones creativas que generaron divisiones entre el público y la crítica. Estos factores contribuyeron a su bajo rendimiento en taquilla.
Ante este panorama, Disney decidió pausar la producción de la adaptación live-action de Enredados, la exitosa película animada de 2010 que narraba las aventuras de Rapunzel. El proyecto ya contaba con el director Michael Gracey y la guionista Jennifer Kaytin Robinson, pero la compañía optó por reevaluar su estrategia de remakes en acción real.
Esta decisión refleja el mal desempeño de Blancanieves y plantea interrogantes sobre el futuro de otras adaptaciones planificadas. En este difícil contexto, la empresa continúa con proyectos como las versiones live-action de Lilo & Stitch y Moana, esperando mejorar el rumbo.