El expresidente, destituido recientemente, está acusado de insurrección.
El expresidente de Corea del Sur, Yoon Suk-yeol, ha comparecido ante un tribunal de Seúl en el inicio del juicio penal en su contra, por cargos de liderar un intento de insurrección al decretar la ley marcial y desplegar tropas al Parlamento el pasado 3 de diciembre.
La audiencia, fue celebrada en la sala 417 del Tribunal del Distrito Central de Seúl. Es la primera comparecencia formal de Yoon Suk-yeol tras ser destituido por unanimidad por el Tribunal Constitucional el 4 de abril, que consideró que el mandatario violó la Carta Magna al intentar interferir con una votación legislativa mediante el uso del Ejército.
Yoon Suk-yeol llegó al tribunal unos 10 minutos antes del inicio del juicio en un vehículo oficial, entrando por el estacionamiento subterráneo por motivos de seguridad. El tribunal no autorizó la solicitud de los medios para tomar imágenes dentro de la sala.

Durante la apertura de la audiencia, se confirmó su identidad y domicilio actual en el complejo Acrovista del distrito de Seocho, donde se instaló el pasado viernes tras abandonar la residencia oficial de Hanam-dong.
Además comparecerán como testigos Cho Sung-hyun, comandante del Primer Grupo de Defensa del Comando de Defensa de la Capital, y Kim Hyung-ki, jefe del Primer Batallón de Fuerzas Especiales del Comando Bélico del Ejército.
Ambos declararon en el previo juicio penal contra Yoon Suk-yeol en el Tribunal Constitucional. En aquel entonces, Cho testificó que su entonces superior, Lee Jin-woo, le ordenó desalojar por la fuerza a legisladores del Parlamento tras la declaración de la ley marcial. Por su parte, Kim habría recibido instrucciones similares de su cadena de mando esa misma noche, según Yonhap.
El exmandatario enfrenta cargos por los que podría resultar condenado a cadena perpetua o incluso a pena de muerte, según lo establece el Código Penal surcoreano en casos de insurrección.