Por: José Fonseca
Afirma la Secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, que lo barato de las elecciones no afectará al proceso de elegir a las autoridades que nos gobiernan, creo que se equivoca.
Uno entiende que elecciones baratas son compromiso con la lopezobradorista “revolución de las conciencias”, pero cambiarle hasta el modo de andar al sistema electoral no necesariamente lo hace más democrático.
Sabe, y sabe bien, la titular de Bucareli que sus elecciones baratas son la peor amenaza a la integridad del proceso, pues no se atreve a garantizar de que el día de los comicios no arrebatarán a los ciudadanos el control de las casillas, donde hasta la fecha han contado y contado bien los votos.
PAN: ¿Barrio? Es el territorio, tontines
Ha dicho el dirigente nacional del PAN, Jorge Romero, cuya inteligencia parece ser rebasada por la crisis existencial del único partido de oposición, ejemplo es que afirma que el PAN necesita más barrio.
Quizá no recuerdan los anayistas que hace menos de 20 años que las campañas panistas, todavía la propaganda la distribuían las familias en los fines de semana y que la decadencia empezó cuando creyeron dejar de ser partido de cuadros para serlo de masas.
No entendieron el lúcido análisis de Federico Berrueto. No aceptan que son partido de territorios, pues según Tom O´Neill: “toda la política es local”. Sobre todo, para superar su crisis existencial, tienen que dejar de avergonzarse por ser partido de centro derecha.
Siglo XVI, España se gestaba, México no era
En siglo XVI, los Reyes de Castilla y León habían expulsado a los árabes, lucha que estuvo a cargo de los castellanos vasallos de Isabel y aunque dominaban ya el centro y sur de Hispania, había disputa con otros que reclamaban ser los legítimos monarcas.
Como sea, decían los textos de historia: “A Castilla y a León, nuevo mundo dio Colon”. Ellos fueron los conquistadores de lo que fue la Nueva España y al paso de cinco siglos se convirtió en México.
Como ocho de cada 10 mexicanos, este mestizo ignora de cuál de los pueblos originarios desciende, pues el México del siglo 21, aún no empezaba a gestarse. Un atento breviario cultural.
 






 
															 
								 
				 
				 
				 
				



 
															 
								 
								 
								 
								 
								