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Los gobiernos de Pekín y Hong Kong insisten en que la ley era necesaria para restablecer la estabilidad en la ciudad tras las masivas protestas antigubernamentales de 2019.

Las autoridades de seguridad nacional de China en Hong Kong y la policía de la ciudad lanzaron su primera operación conjunta conocida públicamente, allanando los domicilios de seis personas sospechosas de conspirar con fuerzas extranjeras para poner en peligro la seguridad nacional.

En el comunicado policial emitido no reveló la identidad de las seis personas sospechosas de infringir la ley de seguridad nacional impuesta por Pekín en 2020 entre noviembre de 2020 y junio de 2024.

Además de sus domicilios, los agentes registraron la oficina de la organización implicada y confiscaron pruebas como documentos bancarios y dispositivos para una mayor investigación, según el comunicado. Se exigió a las seis personas que entregaran sus documentos de viaje.

La rama de seguridad nacional de Pekín en Hong Kong también solicitó la asistencia de la policía de seguridad nacional de la ciudad, incluyendo la organización de entrevistas con las personas implicadas en el caso, según la policía. Sin embargo, la fuerza local no detalló las acusaciones ni a qué organización se refería, afirmando que la investigación seguía en curso. Desde la entrada en vigor de la ley de seguridad de 2020, numerosos activistas destacados han sido procesados ​​o encarcelados por delitos contra la seguridad nacional.

Los gobiernos de Pekín y Hong Kong insisten en que la ley era necesaria para restablecer la estabilidad en la ciudad tras las masivas protestas antigubernamentales de 2019.

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