Medios de comunicación rusos afirman que las tropas norcoreanas han estado combatiendo bajo las órdenes del líder Kim Jong-un
Corea del Norte confirmó oficialmente su participación en la guerra de Ucrania del lado ruso, lo que marca un cambio importante en la dinámica del conflicto.
La declaración fue hecha públicamente por la agencia estatal de noticias KCNA (Korean Central News Agency), informando que tropas norcoreanas han estado combatiendo bajo las órdenes del líder Kim Jong-un.
Según fuentes oficiales, estas tropas han realizado una importante contribución a la liberación del territorio ruso ocupado por Ucrania, destacándose particularmente en la reciente victoria en la región de Kursk. Corea del Norte anunció que había enviado tropas a luchar junto a Rusia en la guerra contra Ucrania. Esta acción se llevó a cabo en virtud del tratado de asociación estratégica integral firmado entre Corea del Norte y Rusia el año pasado.
Según la Comisión Militar Central del Partido de los Trabajadores del Norte, el líder Kim Jong-un tomó la decisión de desplegar tropas con el objetivo de fortalecer la alianza militar entre ambos países.
La agencia KCNA informó que las subunidades de las fuerzas armadas de Corea del Norte consideraron el territorio ruso como propio durante la operación, lo que refleja el nivel estratégico de la relación entre Pyongyang y Moscú.
El líder norcoreano, Kim Jong-un, expresó que los que lucharon por la justicia son todos héroes y representantes del honor de la patria, destacando el papel de las tropas norcoreanas en la liberación del territorio ruso ocupado por Ucrania.

La victoria en la región de Kursk fue presentada por Corea del Norte como un ejemplo del más alto nivel estratégico de la firme amistad militante entre Corea del Norte y Rusia. Según KCNA, las tropas norcoreanas jugaron un papel crucial en la expulsión de las fuerzas ucranianas de la región.
Sin embargo, es importante señalar que tanto Rusia como Ucrania tienen versiones diferentes sobre el control territorial en la región. Rusia afirmó la semana pasada que las fuerzas ucranianas habían sido completamente expulsadas de la última aldea rusa que mantenían en su poder.
En respuesta, Kiev negó esta afirmación, asegurando que sus tropas siguen operando en Belgorod, otra región rusa fronteriza con Ucrania. Esta discrepancia refleja la complejidad del terreno y la naturaleza fluida de la situación en el frente ruso-ucraniano.
Según declaraciones de funcionarios ucranianos, Corea del Norte envió un total estimado de 14,000 soldados, incluidos 3,000 refuerzos para reemplazar las bajas sufridas en combate. A pesar de carecer de vehículos blindados modernos y de experiencia en la guerra con aviones no tripulados, las tropas norcoreanas se adaptaron rápidamente a las condiciones de combate en el campo de batalla. Sin embargo, debido a estas limitaciones, sufrieron numerosas bajas, lo que obligó a Corea del Norte a enviar refuerzos adicionales.
Durante el fin de semana, Rusia confirmó por primera vez que soldados norcoreanos estaban combatiendo junto a las fuerzas rusas en la región de Kursk. Esta confirmación oficial de Moscú vino después de meses de especulaciones sobre la posible participación de Corea del Norte en la guerra.
Ni Rusia ni Corea del Norte habían confirmado o desmentido previamente el despliegue de tropas, lo que ha generado especulaciones y preocupación internacional sobre el impacto de esta intervención en el conflicto.
La participación de Corea del Norte en la guerra de Ucrania podría ser vista como una muestra de lealtad hacia Rusia, pero también como una oportunidad para Corea del Norte de obtener apoyo militar y económico en su propia situación geopolítica.
