Un volcán inestable en el centro de Filipinas entró en erupción brevemente, expulsando una columna de ceniza y escombros de 4,5 kilómetros al cielo, mientras sus estruendos se escuchaban en las cercanías.

El Instituto Filipino de Vulcanología y Sismología informó que una erupción moderadamente explosiva ocurrió en el cráter de la cima del volcán Kanlaon antes del amanecer, con una duración de cinco minutos, según datos sísmicos e infrasonidos.

“La erupción generó una columna voluminosa y grisácea que se elevó aproximadamente 4,5 kilómetros por encima del respiradero antes de desplazarse hacia el suroeste”, añadió el boletín del instituto.

Cayeron cenizas en al menos nueve aldeas al suroeste del volcán, en la isla de Negros, pero no se reportaron heridos ni daños.

La alerta de nivel 3 (de una escala de cinco), establecida durante la erupción del Kanlaon en diciembre, se mantuvo sin cambios, y las autoridades mantuvieron una zona de peligro de 6 kilómetros fuera de los límites.

La alerta significa que el volcán se encuentra en estado de inestabilidad magmática, con mayor probabilidad de erupciones breves y moderadamente explosivas que podrían generar peligros volcánicos.

El Kanlaon también entró en erupción brevemente en abril. Su erupción en diciembre provocó la evacuación de miles de aldeanos a refugios de emergencia, ya que el volcán seguía mostrando signos de actividad.

El volcán de 2.435 metros es uno de los 24 volcanes más activos del país. En 1996, tres excursionistas murieron cerca de la cima y varios más fueron rescatados posteriormente cuando el Kanlaon entró en erupción sin previo aviso, según informaron las autoridades en aquel momento.

Filipinas se encuentra en el llamado “Anillo de Fuego” del Pacífico, una región propensa a terremotos y erupciones volcánicas. El archipiélago también es azotado por unos 20 tifones y tormentas al año, lo que lo convierte en uno de los países más propensos a desastres del mundo.