Marco Rubio, el jefe de la diplomacia estadounidense, alabó a México por haber aumentado su cooperación en seguridad; además, afirmó que tiene la intención de viajar al país latinoamericano en las próximas semanas.

Los Estados Unidos han enviado tropas a la frontera con México, además de imponer aranceles para obligar a México a detener el cruce ilegal de migrantes y el tráfico de fentanilo.

Desde el regreso de Trump, se ha mantenido una tensa relación entre ambos países, sobre todo por las tarifas aduaneras, que castigan a la segunda economía más importante de América Latina después de Brasil.

Sin embargo, a pesar de los ataques, la presidenta Claudia Sheinbaum ha optado por no reaccionar frontalmente y dejar margen para la negociación entre bastidores.

Después de que se diera a conocer las presiones arancelarias, México desplegó 10 mil soldados en su frontera norte, entregó a 29 capos a la justicia estadounidense y reforzó sus operaciones antidrogas.

Rubio señaló que en ocasiones han mantenido algunos aspectos irritantes, pero también áreas de cooperación con el gobierno mexicano que han sido bastante positivas.

Señaló ante la Cámara de Representantes: “Han aumentado su cooperación en materia de seguridad con nosotros de maneras muy productivas”, añadió.

“De hecho, en algún momento de las próximas semanas tengo la intención de viajar posiblemente a México junto con otros miembros del gabinete para concretar algunas de estas áreas de cooperación”, precisó.

El secretario de Estado de EU explicó a los congresistas que la administración Trump se ha centrado en dos temas en su relación con México: el comercio y la cooperación en materia de seguridad.

Afirmó que los cárteles que operan en México y amenazan a los Estados Unidos están armados con armas que se compran en este país y se envían a México.

“Queremos ayudarlos a equiparlos y brindarles información” para combatir a los carteles, varios de los cuales fueron declarados organizaciones “terroristas” globales por Washington, concluyó.