El primer ministro de Mongolia dimitió tras no recibir el apoyo suficiente en una moción de confianza en el parlamento, según informaron medios mongoles. La embajada del país en Washington lo confirmó.

El primer ministro Oyun-Erdene Luvsannamsrai obtuvo 44 votos, muy por debajo de los 64 necesarios, según el sitio web de noticias ikon.mn.

La votación se produjo tras semanas de protestas provocadas por informes sobre el derroche de gastos del hijo del primer ministro. Algunos exigieron la dimisión del primer ministro.

Antes de la votación, Oyun-Erdene advirtió que la votación podría generar inestabilidad y quebrantar la incipiente democracia de Mongolia.

Oyun-Erdene ocupó el cargo durante cuatro años y sobrevivió a peticiones previas de dimisión.

El año pasado, el parlamento se amplió de 76 a 126 escaños tras las reformas electorales. Esto dio lugar a un gobierno de coalición.

Mongolia, situada entre Rusia y China, ha luchado por democratizarse tras su época de partido-estado. Estado comunista durante la Guerra Fría, se ha ido transformando en una democracia desde el colapso de la Unión Soviética.

Los manifestantes han afirmado que las riquezas minerales del país han beneficiado a los intereses comerciales y a los ricos, mientras que muchos mongoles aún viven en la pobreza.

Si bien la democracia aún no prospera en Mongolia, está echando raíces, afirmó Murphy.