Además, las asociaciones ambientales Friends of the Everglades y el Center for Biological Diversity insistieron en su demanda legal para cerrar el centro por sus impactos ambientales.
El nuevo centro de detención de inmigración irregular, llamado “Alligator Alcatraz”, se encuentra en un vasto humedal subtropical en los Everglades de Florida.
El centro podría albergar entre 1.000 y 5.000 migrantes y ha causado críticas por las condiciones inhumanas y temores del impacto ambiental. Los migrantes estarán rodeados de caimanes de hasta 4 metros

Esta prisión forma parte del endurecimiento migratorio de la Casa Blanca en esta segunda administración de Trump, que busca acelerar las detenciones y deportaciones masivas de personas sin estatus legal.
Pero ahora surgen nuevas problemáticas a las que se enfrentan los detenidos en este centro de detención, como la proliferación de mosquitos y de enfermedades propias de la transmisión por su picadura.
Además de las pésimas instalaciones, recordar que las camas tipo litera están rodeadas de cercas de alambre que conforman jaulas para alojar alrededor de 3000 presos.

Pero fue el reguetonero cubano Leamsy Izquierdo, conocido como La Figura, quién denunció que los tratan como “perros” y que solo reciben una comida al día.
Izquierdo fue detenido en Miami la semana pasada, llamó a su novia Katia ‘Figura’ Hernández para describir las condiciones de “Alcatraz caimán”, donde afirma que no hay nada, que el lugar no está preparado para la gente y es una perrera.
Su testimonio es el primero desde que “Alligator Alcatraz” abrió la semana pasada, tras la visita del presidente, Donald Trump.

El cantante le mencionó a su novia que en el lugar los mosquitos parecen elefantes, no hay agua para el baño, les dan una sola comida al día.
En la llamada de Izquierdo, quien es residente legal aunque la semana pasada quedó detenido por un presunto ataque con un arma, se escucha a otro migrante decir que no hay medicinas para la salud mental.
La alcaldesa Daniella Levine Cava del condado de Miami-Dade, reaccionó a las denuncias y exigió al Gobierno federal y al estatal, acceso para monitorear el sitio, donde la semana pasada negaron la entrada a legisladores estatales.

Además, las asociaciones ambientales Friends of the Everglades y el Center for Biological Diversity insistieron en su demanda legal para cerrar el centro por sus impactos ambientales.
Pese a las acusaciones, el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) defendió en sus redes sociales que el presidente Trump y la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, están usando cualquier herramienta disponible para remover a criminales extranjeros ilegales.
“Ya sea el CECOT (Centro de Confinamiento del Terrorismo de El Salvador), Alligator Alcatraz, la Bahía de Guantánamo o cualquier otro centro de detención, los peligrosos criminales extranjeros ilegales estarán fuera de las calles estadounidenses”, publicó en X.