Las autoridades italianas anunciaron el traslado de un grupo de 26 migrantes rechazados a centros de detención gestionados por Italia en Albania.

El buque de la armada italiana Spica zarpó del puerto italiano de Brindisi el martes y atracó en el puerto albanés de Shengjin, a unos 65 kilómetros al noreste de la capital, Tirana, con 26 migrantes, según informaron fuentes gubernamentales en Roma.

El traslado también fue confirmado por fuentes del puerto. Desde allí, los migrantes suelen ser trasladados a un segundo centro de detención en Gjader, 20 kilómetros tierra adentro.

El gobierno italiano no ha revelado la nacionalidad de los migrantes ni otros detalles.

Ambas instalaciones en Albania, gestionadas por las autoridades italianas, se construyeron originalmente para procesar las solicitudes de asilo de personas interceptadas por Italia en el mar Mediterráneo en busca de una vida mejor en Europa. Sin embargo, tras su apertura en octubre, los tribunales italianos han prohibido su uso por parte de las autoridades y pequeños grupos de migrantes enviados allí han regresado a Italia.

En marzo, el gobierno de extrema derecha italiano, liderado por la primera ministra Giorgia Meloni, aprobó un decreto que amplió el uso de los centros de tramitación acelerada de asilo albaneses para incluir la detención de solicitantes de asilo rechazados con órdenes de deportación.

No está claro cuánto tiempo pueden permanecer retenidos los migrantes en Albania. En Italia, pueden estar detenidos hasta 18 meses en espera de su deportación. No hay información disponible sobre el destino del primer grupo de 40 migrantes rechazados, transferidos en abril. Los medios locales han publicado informes no confirmados que 16 de ellos han sido devueltos a Italia.

Los centros albaneses, abiertos en octubre, acogieron a tres grupos con un total de 73 migrantes en octubre, noviembre y enero. Pasaron solo unas horas en Albania y fueron devueltos a Italia después de que los magistrados italianos se negaran a validar su detención en el país no perteneciente a la UE.

Italia ha acordado acoger a los migrantes a los que se les conceda asilo, mientras que aquellos cuyas solicitudes sean rechazadas se enfrentan a la deportación directa desde Albania.